Cayeron en la prórroga ante Polonia 88-82
El Mundial U17 masculino se ha puesto cuesta arriba. La derrota de este martes ante Polonia (88-82) en la prórroga complica, y mucho, el camino de la selección española hacia la recta final de la competición. España se jugará este miércoles contra Australia (21:30 h.) la clasificación para cuartos.
Las derrotas ante Alemania y Canadá habían dejado a la selección española con la obligación de vencer a Polonia y Australia en las dos últimas jornada de la primera fase del Mundial para acceder a cuartos de final con opciones intactas de entrar en la lucha por los puestos de privilegio. Sin embargo, en la primera de las ‘finales’ la suerte le fue esquiva a la selección española, que después de dominar a Polonia durante casi todo el partido, se encontró con una prórroga donde los polacos jugaron mejor. Con la derrota ante Polonia la continuidad de España en la lucha por los puestos de honor del Mundial queda muy mermada. Ahora los españoles deberán derrotar a Australia en la última jornada (miércoles (21:30 h.) para acceder a unos cuartos de final, donde con casi toda seguridad se medirán a Estados Unidos.
A pesar de la trascendencia del choque, España saltó a la pista sin miedo y con un respeto bien entendido por una Polonia que hasta ahora era la sensación del Mundial. A la selección española no le intimidaron los abultados resultados obtenidos por Polonia en los tres primeros partidos de la competición. Los jóvenes que dirige Diego Ocampo saltaron a la pista muy centrados, especialmente en ataque, y liderados por Alejandro Suárez (3/3 triples) y Jaime Fernández (2/2 triples) consiguieron unos espectaculares 28 puntos en los 10 primeros minutos.
Esa explosión ofensiva pareció dejar agotados a ambos conjuntos. Las defensas se impusieron claramente y del 26-28 con el que se cerró el primer cuarto, en los siete primeros minutos del segundo sólo 7 puntos subieron al marcador (27-34, min. 17). En los últimos instantes del segundo cuarto el base Mateusz Ponitka, máximo anotador del Mundial hasta el momento, asumió la responsabilidad ofensiva de su equipo y con 6 puntos consecutivos acercó peligrosamente a su equipo 35-36. Aunque una penetración del escolta español Jaime Fernández en la última jugada de la primera parte dio un poco de aire a España al dejar el marcador al descanso en 35-38.
En la reanudación del partido, Ponitka encontró en la torre polaca Karnosky (2,12 m.) un buen complemento para intentar darle la vuelta al partido y tomar la delantera en el marcador, pero a los españoles eso no frenó su ánimo ni su buen hacer. Javier Medori y Jorge Sanz irrumpieron en el juego ofensivo español con mucha fuerza y tres triples del base español catapultaron a la selección española hasta los 12 puntos de ventaja (46-58, min. 27), la máxima del partido hasta ese momento.
El partido marchaba bien encarrilado para los españoles, que aguantaron hasta el final del tercer cuarto con una ventaja de casi 10 puntos (54-63, min. 30), gracias, otra vez, a una penetración de Jaime Fernández en los últimos segundos.
A falta de 10 minutos para el final el peligro de la acumulación de faltas en los hombres interiores españoles suponía el principal borrón en el sensacional papel de los jugadores españoles. Y se acentuó aún más con la cuarta falta cometida por Alejandro Suárez a poco de iniciarse el último cuarto. Diego Ocampo tuvo que sustituirle e inmediatamente se acumularon los problemas. Polonia consiguió un parcial de 4-0 (60-65) y obligó al seleccionador español a solicitar un tiempo muerto para reestructurar el equipo español para los últimos 7 minutos de partido.
Los consejos de Ocampo dieron resultados y a falta de 2:24 para el final la selección española mantenía una ligera ventaja (72-77). Sin embargo, a partir de ese momento los polacos fueron recuperando terreno hasta empatar el partido a falta de 28 segundos (77-77). España dispuso de un ataque para ganar el partido en el tiempo reglamentario, pero esta vez Jaime Fernández no acertó en su penetración y el encuentro se fue al tiempo extra (77-77, min. 40).
La prórroga se puso de cara para el conjunto polaco gracias al acierto en los tiros libres y a una jugada de 2+1 perfectamente aprovechada por Ponitka (84-81, min. 43). Los nervios y precipitaciones hicieron mella en los jugadores españoles, que ya no consiguieron rehacerse (86-81).
POLONIA, 88 (26+9+19+23+11): Ponitka (26), Karnowski (20), Michalak (17), Gielo (13), Szymkiewicz (4), Koelner (2), Grochowski (2), Niedzwiezki (2), Bonarek (2), Matczak (0) y Spica (0).
ESPAÑA, 82 (28+10+25+14+5): Jaime Fernández (24), Jorge Sanz (15), Alejandro Suárez (15), Daniel Díez (10), Javier Medori (6), Lluis Conde (5), Julen Olaizola (4), Lluis Costa (3), Fernando Cerqueira (0), Ricardo Pampano (0), Mamadou Diop (-) y Alex Ramón (-).
Comunicación FEB
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